
Cuando empiezas a invertir, es fácil centrarse solo en la rentabilidad y olvidarse de los impuestos. Sin embargo, la fiscalidad es una parte fundamental de cualquier estrategia financiera. Saber cómo tributan tus inversiones puede ayudarte a evitar sorpresas desagradables, aprovechar ventajas fiscales y, en definitiva, sacar más partido a tu dinero. En esta entrada te explico los conceptos fiscales más importantes que debes conocer si eres un inversor principiante en España.
¿Por qué es importante entender la fiscalidad de las inversiones?
Cada vez que obtienes un beneficio con tus inversiones, ya sea vendiendo acciones, cobrando dividendos o recibiendo intereses, tienes que pagar impuestos. No conocer las normas puede llevarte a cometer errores, pagar de más o, peor aún, tener problemas con Hacienda. Además, una buena planificación fiscal puede ayudarte a reducir la factura de impuestos y aumentar tu rentabilidad neta.
Tipos de rendimientos e impuestos
En España, los beneficios que obtienes con tus inversiones se consideran rendimientos del capital mobiliario o ganancias patrimoniales. Veamos los principales casos:
1. Ganancias y pérdidas patrimoniales
Se producen cuando vendes un activo (acciones, fondos, criptomonedas, inmuebles, etc.) por un precio superior (o inferior) al que lo compraste. La diferencia es la ganancia (o pérdida) patrimonial.
Ejemplo práctico:
Compras 10 acciones de una empresa a 10 euros cada una (100 euros en total). Un año después, las vendes a 15 euros cada una (150 euros en total). Has obtenido una ganancia patrimonial de 50 euros.
2. Rendimientos del capital mobiliario
Incluyen los intereses de cuentas bancarias, depósitos, bonos, dividendos de acciones y participaciones en fondos de inversión.
Ejemplo práctico:
Tienes un depósito a plazo que te da 100 euros de intereses al año. Esos 100 euros son un rendimiento del capital mobiliario.
¿Cuánto hay que pagar a Hacienda?
Las ganancias patrimoniales y los rendimientos del capital mobiliario tributan en la base del ahorro del IRPF, con los siguientes tipos (2025):
- Hasta 6.000 euros: 19%
- De 6.000 a 50.000 euros: 21%
- De 50.000 a 200.000 euros: 23%
- Más de 200.000 euros: 27%
Ejemplo:
Si ganas 1.000 euros con la venta de acciones, pagarás 190 euros en impuestos (19%).
Compensación de pérdidas y ganancias
Si en un año tienes pérdidas en unas inversiones y ganancias en otras, puedes compensarlas para pagar menos impuestos. Por ejemplo, si ganas 500 euros con unas acciones y pierdes 200 euros con otras, solo tributas por 300 euros.
Además, si después de compensar todo aún tienes pérdidas, puedes guardarlas para compensar en los cuatro años siguientes.
Fiscalidad de los fondos de inversión
Una de las ventajas de los fondos de inversión en España es que puedes traspasar tu dinero de un fondo a otro sin pagar impuestos en ese momento. Solo tributas cuando reembolsas el dinero a tu cuenta corriente. Esto te permite cambiar de estrategia sin “pasar por caja” cada vez.
Ejemplo:
Si tienes un fondo de renta fija y lo cambias por uno de renta variable, no pagas impuestos hasta que vendas el fondo y retires el dinero.
Fiscalidad de los ETFs
A diferencia de los fondos de inversión, los ETFs (fondos cotizados) no permiten traspasos sin tributar. Cada vez que vendes participaciones de un ETF con ganancia, tienes que declararla y pagar impuestos ese año.
Fiscalidad de los dividendos
Los dividendos que recibes de acciones españolas o extranjeras tributan como rendimientos del capital mobiliario. El bróker suele retener un porcentaje, pero debes incluirlos en tu declaración de la renta.
Ejemplo:
Si recibes 200 euros en dividendos, el bróker puede retener el 19%. Aun así, debes declararlos y, si corresponde, pagar la diferencia.
Fiscalidad de las criptomonedas
Las ganancias obtenidas al vender criptomonedas tributan como ganancias patrimoniales. Debes declarar todas las operaciones, aunque cambies una criptomoneda por otra. Además, si tienes criptomonedas en el extranjero y superas ciertos límites, debes informar a Hacienda mediante el modelo 721.
Obligaciones de información
- Declaración de la renta: Si tienes ganancias o rendimientos, debes incluirlos en tu declaración anual.
- Modelo 720/721: Si tienes inversiones en el extranjero (cuentas, acciones, criptomonedas) por valor superior a 50.000 euros, debes informar a Hacienda.
- Retenciones: Los bancos y brókers suelen practicar retenciones, pero la responsabilidad última de declarar es tuya.
Consejos para inversores principiantes
- Lleva un registro de todas tus operaciones: Anota compras, ventas, fechas y precios. Así será más fácil hacer la declaración.
- Consulta las comisiones: Las comisiones de compra y venta se pueden restar de las ganancias a efectos fiscales.
- Aprovecha las pérdidas: Si tienes pérdidas, úsalas para compensar ganancias y pagar menos impuestos.
- No dejes todo para el último momento: Infórmate antes de invertir y revisa tu situación fiscal cada año.
- Consulta a un asesor si tienes dudas: La fiscalidad puede ser compleja, sobre todo si inviertes en el extranjero o en productos nuevos como criptomonedas.
Ejemplo de planificación fiscal
Supón que en 2025 has ganado 2.000 euros con la venta de acciones y has perdido 500 euros con criptomonedas. Puedes compensar las pérdidas y solo tributar por 1.500 euros. Si además tienes dividendos por 300 euros, tributarás por un total de 1.800 euros en la base del ahorro.
¿Qué pasa si no declaras tus inversiones?
No declarar las ganancias puede suponer sanciones, recargos e intereses de demora. Hacienda cruza datos con bancos y brókers, así que es muy difícil que pase desapercibido. Mejor ser transparente y cumplir con tus obligaciones.
Entender la fiscalidad de las inversiones es clave para cualquier inversor, por pequeño que sea. Saber cómo tributan tus ganancias, cómo compensar pérdidas y qué obligaciones tienes te ayudará a evitar problemas y a sacar más partido a tu dinero. Si tienes dudas, consulta siempre con un asesor fiscal y mantente informado de los cambios en la normativa. Así, podrás invertir con tranquilidad y aprovechar todas las ventajas legales a tu alcance.