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Diferencias entre acciones y bonos explicadas fácil

21 de abril de 2025

Cuando empiezas a interesarte por el mundo de la inversión, dos palabras aparecen por todas partes: acciones y bonos. Son los productos financieros más conocidos y, aunque a veces se mencionan juntos, en realidad son bastante diferentes. Entender bien en qué consiste cada uno y cómo funcionan es fundamental para tomar buenas decisiones con tu dinero. En esta entrada te explico de forma sencilla qué son las acciones y los bonos, en qué se diferencian, cuáles son sus ventajas y desventajas, y cómo puedes combinarlos en tu estrategia de inversión.

¿Qué es una acción?

Una acción es una parte de una empresa. Cuando compras una acción, te conviertes en propietario de un pequeño porcentaje de esa empresa. Si la empresa va bien, el valor de tus acciones puede subir y, además, puedes recibir parte de los beneficios en forma de dividendos. Si la empresa va mal, el valor de tus acciones puede bajar y puedes perder dinero.

Por ejemplo, imagina que compras 10 acciones de una empresa que cotiza a 10 euros cada una. Has invertido 100 euros. Si la empresa crece y el precio de la acción sube a 15 euros, tus 10 acciones ahora valen 150 euros. Si decides venderlas, habrás ganado 50 euros. Pero si la empresa tiene problemas y el precio baja a 7 euros, tus acciones valen solo 70 euros y si vendes, pierdes 30 euros.

Las acciones se compran y venden en la bolsa de valores, y su precio cambia constantemente según la oferta y la demanda, las noticias sobre la empresa, la economía global y muchos otros factores.

¿Qué es un bono?

Un bono es un préstamo que le haces a una empresa, a un gobierno o a una institución. Cuando compras un bono, estás prestando tu dinero a cambio de que te lo devuelvan en una fecha futura (fecha de vencimiento) y te paguen unos intereses periódicos (cupón). Los bonos suelen considerarse inversiones más seguras que las acciones, aunque también tienen riesgos.

Por ejemplo, imagina que compras un bono de 1.000 euros emitido por el Estado español, con un interés del 2% anual y un vencimiento a 5 años. Cada año recibirás 20 euros de intereses y, al cabo de 5 años, te devolverán los 1.000 euros iniciales. Si el emisor del bono (en este caso, el Estado) tiene problemas para pagar, podrías perder parte o todo tu dinero, pero esto es poco frecuente en países con economías estables.

Los bonos también se pueden comprar y vender antes de su vencimiento, y su precio puede variar según los tipos de interés del mercado y la solvencia del emisor.

Principales diferencias entre acciones y bonos

1. Propiedad vs. préstamo:

  • Las acciones te convierten en propietario de una parte de la empresa.
  • Los bonos te convierten en prestamista; la empresa o el gobierno te debe dinero.

2. Rentabilidad y riesgo:

  • Las acciones pueden dar más rentabilidad, pero también son más arriesgadas. Su precio puede subir mucho, pero también bajar rápidamente.
  • Los bonos suelen ser más estables y predecibles, pero la rentabilidad suele ser menor.

3. Ingresos:

  • Las acciones pueden dar dividendos, pero no están garantizados y dependen de los beneficios de la empresa.
  • Los bonos pagan intereses fijos (cupón), que suelen estar garantizados salvo que el emisor tenga problemas graves.

4. Plazo:

  • Las acciones no tienen vencimiento; puedes mantenerlas el tiempo que quieras.
  • Los bonos tienen una fecha de vencimiento, momento en el que recuperas tu dinero (si todo va bien).

5. Prioridad en caso de quiebra:

  • Si una empresa quiebra, los bonistas (los que tienen bonos) cobran antes que los accionistas. Los accionistas suelen ser los últimos en recuperar algo, si es que queda dinero.

Ejemplo práctico de combinación

Supón que tienes 2.000 euros para invertir y quieres repartir el riesgo. Puedes poner 1.000 euros en acciones de varias empresas y 1.000 euros en bonos del Estado. Si la bolsa sube, tus acciones pueden darte buenas ganancias. Si la bolsa baja, los bonos te darán estabilidad y seguirás recibiendo intereses. Así, si un año las acciones pierden valor pero los bonos se mantienen, tu pérdida será menor que si solo tuvieras acciones.

¿Cuál es mejor para ti?

No hay una respuesta única. Depende de tu perfil, tus objetivos y tu tolerancia al riesgo. Si eres joven y puedes asumir más riesgo, puedes invertir más en acciones para buscar mayor rentabilidad a largo plazo. Si prefieres dormir tranquilo y no te gustan los sobresaltos, los bonos pueden darte más seguridad. Lo ideal es combinar ambos productos para aprovechar lo mejor de cada uno.

Ventajas y desventajas

Acciones:

  • Ventajas: Alta rentabilidad potencial, posibilidad de dividendos, liquidez (puedes venderlas cuando quieras).
  • Desventajas: Alta volatilidad, riesgo de perder dinero, no hay ingresos fijos garantizados.

Bonos:

  • Ventajas: Ingresos fijos, menor riesgo, prioridad en caso de quiebra.
  • Desventajas: Rentabilidad limitada, riesgo de impago si el emisor tiene problemas, pueden perder valor si suben los tipos de interés.

Errores comunes

  • Pensar que las acciones siempre suben: pueden bajar y perder dinero.
  • Creer que los bonos son 100% seguros: si el emisor quiebra, puedes perder.
  • No diversificar: poner todo el dinero en una sola acción o bono es muy arriesgado.
  • No informarse sobre el emisor del bono: es importante saber a quién le prestas tu dinero.

Consejos para principiantes

  • Infórmate antes de invertir.
  • No pongas todo tu dinero en lo mismo.
  • Piensa a largo plazo.
  • Revisa las condiciones de los bonos (interés, plazo, emisor).
  • Diversifica entre acciones y bonos para reducir el riesgo.

Acciones y bonos son dos formas diferentes de invertir. Cada una tiene sus ventajas y sus riesgos. Lo importante es entenderlas bien y elegir la que mejor se adapte a ti. Y recuerda: diversificar siempre es buena idea. Si tienes dudas, empieza poco a poco y sigue aprendiendo. Así, tu dinero estará más protegido y tendrás más posibilidades de conseguir tus objetivos financieros.